El reencuentro..

por **Nina Black** Jue Feb 03, 2011 2:47 am

Sentí su cercanía, sus manos en mi espalda. Su boca recorrió la mía y sus besos me llenaron, no aguanté mas ignorarle más. Le abracé con fuerza y él respondió empujando nuestros cuerpos contra la pared de su habitación, aplastando su cuerpo contra el mío mientras nuestras bocas se movía una contra la otra. Una de sus manos se apoyaba en la pared, mientras que la otra tocaba mi cuerpo; mi brazo; mi cintura; mi cara; mi pelo…
Nos despegamos de la pared y lentamente nos dirigimos hacia la cama que estaba situada en medio de la habitación. Mis dedos se enroscaban en su pelo y apreté su cara contra la mía, enfureciendo nuestros besos. Me mordió el labio, me hizo daño, pero la verdad es que lo echaba de menos. Mis manos resbalaron por su espalda y apreté aun más su cuerpo contra el mío. Deslicé mis manos por debajo de su camiseta, acariciándolo, a medida que se la subía. Él alzó los brazos, para ayudarme , y cuando estuvo desprovisto ante mí, empujó mi cuerpo contra la cama, donde caí de espaldas, pero no tuve ni tiempo para dar un único respiro, mis labios estaban demasiado ocupados. Sentí su boca resbalar por mi cuello, besando mi vientre y cintura por encima de la tela de la camiseta. Una de sus manos se deslizó dentro de ésta y a medida que la subía, iba besando mi torso. Cuando finalmente me pasó la camiseta por la cabeza y nuestros labios se encontraron, mis manos se deslizaron de sus hombros a su espalda, para momentos después volver a subir. Sentí como sonreía al ver mis manos moverse por su cuerpo y pasó la suya por debajo de mi espalda, haciéndola pasar por mi muslo, tirándolo hacia arriba, de modo que le envolatase la cintura con mi pierna.
—¿Aún sigues enfadada? —susurró con voz entrecortada.
—Sabes que sí —dije, y volví a atraer su boca con la mía.
Su cuerpo cubría el mío, protegiéndome de la nada, y así siguió cuando le quité sus pantalones, cuando me quito los míos, y cuando la demás ropa continuo saliendo volando.
La verdad es que había venido en busca de respuestas… respuestas en concreto.. pero, él hacía que olvidase mi objetivo con una sola mirada. Con sólo un simple roce me había distraído y me sentía cada vez más llena de él… cada beso, roce, caricia… eran distintos… distintos y poderosos.

Se lo dedico... ¡a él!